Sim Martin
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No recomendaría a Yolanda como psicóloga, ni siquiera a mi peor enemigo. Durante las sesiones, no me hizo ninguna pregunta sobre mi situación personal, sino que se dedicó a hacer suposiciones sobre mí sin conocerme. Además, gran parte de las sesiones consistieron en ella hablando sobre cómo soy, sin haberme consultado ni un solo detalle relevante.
Fui a terapia por un problema de ansiedad y trastornos de la conducta alimentaria (TCA), pero cada vez que terminaba una sesión, me sentía aún más ansiosa. Su consejo sobre mi TCA fue extremadamente superficial y dañino: "Deja de hacerlo", "No entres a la cocina", "No vayas a comprar comida", como si una adicción fuera tan fácil de resolver. Es comparable a decirle a un adicto al alcohol o a las drogas que simplemente no los compre. Este tipo de respuestas no se esperan de un profesional de la salud mental.
Cuando le mencioné que me preocupaba la situación de los alquileres en Barcelona, su solución fue: "Cómprate una casa". Al explicarle que no tenía el dinero necesario para la entrada, me culpó diciéndome que era "derrochadora" y que "parecía que yo tenía menos ganas de resolver mis problemas que ella". Este tipo de respuestas tan insensibles y poco realistas no deberían provenir de una profesional.
Lo que más me sorprendió fue su actitud defensiva cuando le mencioné que su manera de tratarme era nefasta. Me dijo que no me gustaba "escuchar la verdad", cuando lo que realmente me molestó fue su falta de profesionalismo y su tendencia a hacer suposiciones sin preguntarme nada primero.
Entiendo que sea posible no establecer lo que ella llama la 'alianza terapéutica', pero este no fue un problema de preferencia, sino que faltó la base de la profesionalidad. Ningún psicólogo, bajo ninguna circunstancia, debería dirigirse a un paciente de una manera tan superficial y cortante, haciéndolo sentir que debe defenderse de sus suposiciones en lugar de sentirse cómodo para abrirse.
Añadí esta reseña para que futuros pacientes estén informados de que no es normal sentirse atacado o maltratado por un profesional que debería ser empático y comprensivo. Aqui no vais a encontrar ni empatia ni comprension.
-Simona-